La Lipoescultura Laser: Un proceso rápido y sin riesgos

Si bien es cierto la belleza cuesta, las mayoría de personas, ya sea varones o mujeres no queremos asumir tal reto y preferimos esquivar o buscar alternativas para lograr nuestros objetivos de una manera más sencilla, rápida y sin correr algún riesgo. Estas alternativas en cuestión, por lo general tienen que ver con la búsqueda de métodos, técnicas o tratamientos que eviten o no produzcan algún tipo de molestia. Tal como ocurre con la, ahora ya conocida y revolucionaria lipoescultura laser.

Muchas fueron las molestias que sufrieron los pacientes al someterse a la lipoescultura tradicional, como el riesgo que corren frente a la anestesia, el dolor e incomodidad después de la intervención, el sangrado o temor a la lenta cicatrización de la herida, la cicatriz que es muy difícil de atenuarse o desaparecer del todo. Ante todos estos temores, la ciencia en el campo de la cirugía estética ha ideado un nuevo proceso para eliminar ese molesto exceso de grasa que presentan tanto hombre como mujeres, mediante la lipoescultura laser. Debemos tener en cuenta que el exceso de grasa en nuestro cuerpo afecta el buen funcionamiento del corazón, el trabajo pulmonar y la presión sanguínea.

Si usted está decidido a someterse a una lipoescultura láser, es necesario conocer a grandes rasgos, el procedimiento que siguen los especialistas durante la operación. Ya que a pesar de ser ambulatoria y durar tres o cuatro horas (dependiendo de las zonas a trabajar) es un proceso delicado en el cual usted estará sin anestesia y consiente de todo lo que se le realice. El proceso se inicia con el ingreso de una cánula de 2 mm a la piel, esta contiene tres elementos básicos y esenciales: un suero fisiológico que actúa como un anestésico, la epinefrina, especial para que los vasos sanguíneos no sangren y el bicarbonato, empleado para disminuir la sensación de ardor que se siente cuando se ingresa la solución. Este rayo o láser que penetra la piel va disolviendo el tejido adiposo y lo transforma en un líquido de consistencia aceitosa que cae a un recipiente debidamente esterilizado. Muchas veces

este líquido se vuelve a emplear para el injerto de algunas zonas, como glúteos o caderas. La grasa que queda dentro del organismo, será eliminada durante los días siguientes a la operación a través de la orina.

Finalizado el proceso de la lipoescultura Laser, el paciente podrá reincorporarse a sus labores cotidianas luego de 48 horas (como máximo), se le recomienda descansar un día luego de la intervención. La cicatriz que queda es de 2mm y se desaparece en poco menos de dos semanas. Es recomendable también el empleo de una faja elástica durante un mes, así como someterse a sesiones de masajes o drenaje linfático. Esto es muy importante, ya que es necesario remover los líquidos grasos que permanecen aún en el organismo para que puedan ser eliminados, ya sea por la orina o por el sudor.

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